La prueba tocó mi puerta,
un diagnostico heló mi sangre,
vi venir el cáncer que se instaló en mi pecho…
Mis senos ya no son los mismos
y aún así mi sangre hace ebullición,
con la fuerza de un latido feroz.
[Dedicado a todas las mujeres que luchan contra un cáncer de mama, porque la seducción, la pasión, viene del deseo, del amor quebrando huesos y sobrepasa cualquier limitación. Desnúdate mujer]
***
Me miras, con pupilas desorbitadas,
no hay un cabello seductor, es solo mi cráneo
víctima de una rebeldía absoluta de no esconderse,
de mostrarse sin vergüenza,
como se muestran mis pechos desiguales
… Al caer la blusa.
Ya no soy la misma, y se estremece el alma y el pudor,
son tantas cicatrices como historias y fracasos,
aprieto los dientes para no llorar,
me regocijo en la victoria de una batalla
que se enfrenta día a día,
y en el calor de tus dedos,
se desliza un botón por el ojal.
Quieres detallarme y memorizar cada rincón,
mis estructuras solo me piden que tus ojos
pasen por alto las diferencias.
Los temores y la timidez susurran:
“desvíalo a tu espalda”
Yo callo, hago caso omiso,
no quiero esconderme,
deseo fieramente que me mires,
lucho con el instinto y la realidad.
No puedo pedirte que esperes
unas cuantas cirugías más...
-No quiero que pares-
Exaltaré este cuerpo que esta ¡Vivo!
Quizás roto pero ¡Vivo!
Y sí, aún me quemo bajo la piel,
aún me incendio en el roce de tus sabanas,
aún me fundo en el hervor de tus besos compulsivos.
Ya no importa un cuerno.
Me acepto y me aceptas,
mordamos la vida
mientras surfeamos la ola.
Una vez más.
¿Cómo luce mi cuello desnudo?
Siento las yemas de tus dedos
hundirse en mi cabeza,
se siente tan sensual
como enlazar mis dedos entre tus cabellos
Me pregunto ¿cómo lo sientes tu?
Debe ser estupendo si consumes la noche en ello.
Sonrío.
Sonríes.
Muerdes mi oreja,
desnúdate mujer, dices
desnúdame, replico.
Y se alza la luna.
@MariteOtero
