desliza el
agua, nariz, labios, pómulos gotean.
Corren bendiciones
por mis hombros
… Y me
desgasto.
Tiemblo con
un plan,
una idea que
me revuelca,
tan fría y cálida.
-Tan ausente-
Seco mi
cuerpo,
y cada fibra
cosquillea mis poros,
cuento mis
lunares en una idea
que necesita
tiempo.
-Perverso-
Seco mi cabello,
rubio platino
y mis ojos sintéticos
tan verdes,
tan grandes.
Me regresan
la mirada.
(La tuya, que
imagino).
Soy yo, La
Rusa.
Maquillo cada
parpado,
y desrizo
mis pestañas,
sé que no te darás cuenta que existen…
Aún así, me tomo el trabajo.
Mi boca no
necesita color,
sangra de
ganas y penas,
una crema de
jazmín,
me vuelve sexy y sedosa.
Ojalá fuera
el olor de tus rosas.
Una malla
cubre mi cuerpo,
largas piernas
de marfil
quizás con rastros
endemoniados
-De
celulitis-
Me tapo toda
y me muestro entera,
ya no soy la
misma -Pienso-
Ya no soy
como esas…
-Tu día a día-
Mientras
listones rosas aprietan mis pechos.
Me amargo.
Un dulce
amargo, como un café favorito.
Y así,
añejada como el vino,
con historias
en el cuerpo de dos hijos,
me propongo,
me juego,
y me apuesto.
-La fiesta-
Calzo mis
tacones,
los que
jamás usaría delante de la puerta,
me antojo mujer
con unos años de más,
y una
felicidad de menos.
-Mujer-
Tiemblo,
como una
virgen,
como una
tonta,
como si
jamás hubieses tocado
-Mi cuerpo-
Maniquí de
hiel,
acalorado de
ganas,
de que más allá
de la ira
y el
malparido rencor,
me sepas
mujer.
La misma que traspasa tu deseo,
y que con serrucho, divide tu cama,
en dos.
Tu… Trabajas
una vez más en tu Mac
Yo, me derrito
acobardada
-Temo-
Mientras
apoyo mi metro ochenta
en aquella
esquina tan fría como el infierno.
Alza tus ojos,
me miras, no
reaccionas,
muero si no me reconoces real,
de sangre y
sal
de vida.
Estiras tu
mano, sonríes cobarde,
desatas el
lazo rosa que llega hasta el ombligo,
el
envoltorio de tus dulces, que aunque dudes,
siguen siendo...
Tu malparida
adicción.
Soy yo, la
diosa, la rusa,
el maniquí,
… En tu
destajos, en tus mordidas, en cada sueño
y como
siempre, en cada pesadila.
Como te dije por momentos, al inicio, recordè la canciòn "De Cartòn Piedra", sobretodo por aquello de "mis ojos sintéticos tan verdes": pero ahora la locura era la del maniquì. Y me dejè llevar por ella, por el maniquì, por la sensaciòn, por lo que describes y descubres...
ResponderEliminarPero luego lo sentì autobiogràfico (solo sensaciòn) me dejè llevar por ella. y màs bien me detuve y Luego me perdì.
Sin embargo, desde que leì el primero, el anterior, el furtivo, me agrada la sensaciòn de que dignificas (no consigo otra palabra) lo sensual que es tan fàcil y frecuentemente subestimado... en fìn.
Gracias nuevamente por compartirlos.
Gracias a ti por tus palabras, pocos se atreven a dejar comentarios por un tema tabú y de respeto, a mi me nutren, me inspiran a seguir trabajando en explorar y describir la sensualidad femenina, me gusta robarme historias y hacerlas mías, mezclar las vivencias y tener anécdotas nuevas que imaginar, creo que es mi fuerte! el sexo es sublime y creo que se debe rescatar desde el punto de vista de la mujer, que tanto prefiere callar, a mi me encanta llegar con mis palabras y crear la duda de lo real a lo imaginario... Bienvenido a este espacio :) una vez más, gracias :)
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